¡Pasamos 2800 horas al año bajo nuestro edredón! Dormir es esencial, pero también es un momento de relax imprescindible para recargar las pilas, y el confort y el bienestar son dos factores a tener en cuenta a la hora de elegir la ropa de cama.

La cama es un pequeño mundo en sí misma. Ya sea para dormir, leer o jugar, en familia o en pareja, la cama es una parte esencial de nuestra vida cotidiana, y no siempre le damos la importancia que merece. La elección de la cama como mueble, la elección del colchón en función de sus necesidades y gustos, ¡pero también su ropa de cama! Los estampados, por supuesto, para mayor comodidad visual, pero también el material del que está hecha la sábana. Un tejido tendrá propiedades y cualidades diferentes en función de su composición, trama y tratamiento.

Por eso es importante saber qué tejido elegir para la ropa de cama antes de comprarla.

Los distintos materiales de la ropa de cama

El algodón es el principal material utilizado en la ropa de cama.

El algodón sigue siendo el material preferido. Esta fibra natural tiene propiedades absorbentes y es suave al tacto, lo que garantiza una sábana agradable, cómoda y resistente. Además, el algodón es fácil de cuidar: se lava rápidamente, resiste altas temperaturas -hasta 90°- y se seca con facilidad.

Sin embargo, hay varias propuestas de materias primas para tejer las sábanas.

Lino: otra fibra natural, el lino también tiene propiedades termorreguladoras. El lino facilita la evacuación de la humedad al tiempo que conserva el calor. Por tanto, una sábana de lino es agradable en cualquier estación. Lo mejor es en verano, sobre todo si vives en una región calurosa. Otra ventaja es que el lino es naturalmente hipoalergénico. Pero cuidado con la calidad de impresión. La fibra natural pierde esta cualidad si se tiñe mediante un proceso que no cumple las normas textiles europeas.

Por último, el lino es muy resistente, no se estropea con los lavados e incluso se vuelve naturalmente más suave al tacto con cada lavado. Sin embargo, el lino no es para todo el mundo: siempre será menos suave al tacto que una sábana de algodón, también es menos fácil de cuidar y puede tardar mucho en secarse.

El término medio: ¡lassábanas de mezcla de lino! Si duda entre el lino y el algodón, el semilino es una mezcla de al menos un 45% de lino y el resto de algodón. Así se beneficia de las características de ambas fibras: la suavidad y finura del algodón combinadas con las cualidades termorreguladoras y antialérgicas del lino.

Por último, las sábanas de polialgodón están hechas de una mezcla de poliéster (50%) y algodón (50%). Las sábanas de polialgodón son más ligeras que las de fibras naturales y se secan muy rápidamente. Las sábanas de polialgodón resisten altas temperaturas y el secado en secadora, y como prácticamente no se arrugan (basta con tenderlas para que se sequen o doblarlas en cuanto estén secas), no necesitan planchado. Por último, son más baratas que las sábanas de fibra natural. En cambio, pierden gran parte de las propiedades de transpirabilidad y termorregulación de una fibra natural. En consecuencia, son mucho menos confortables y menos suaves al tacto.

Los diferentes tejidos de una sábana

El tejido es un factor determinante en la elección de la ropa de cama

Utilizando la misma materia prima, la forma de entrelazar los hilos dará al tejido características diferentes: sedoso, esponjoso, elástico... Así que, en función de lo que desee, puede elegir uno u otro de estos métodos de tejido para sus conjuntos de cama.

El percal de algodón se fabrica con las fibras de algodón más largas. La característica esencial del percal de algodón es su trama tupida y regular: los hilos se cruzan (uno arriba y otro abajo) de forma continua y regular. Esta estructura del tejido confiere al percal estabilidad y resistencia en toda su longitud, así como un aspecto y un tacto de gran calidad. Cuanto más tupido y denso sea el tejido del percal, más bonito y "elegante" será el resultado final de la ropa de cama.

Cuanto mayor sea el número de hilos/cm2 de la trama, mejores serán las cualidades específicas del percal: al menos 80 hilos/cm2 para un percal estándar; 120 hilos/cm2 para las sábanas de gama alta y de lujo. Una trama más alta dará lugar a un producto raro y excepcional. El percal puede tejerse hasta 300 hilos/cm2, lo que hace que la sábana resulte casi crujiente al tacto y ofrezca una transpirabilidad y un confort máximos.

Al igual que el percal, el satén está tejido con fibras largas de algodón. El satén también es suave al tacto. La diferencia radica en el aspecto del satén de algodón, que tiene un acabado satinado, como su nombre indica, y es por tanto más brillante que el percal, que tiene un acabado mate. Esta diferencia visual se debe a la forma en que se entrelazan los hilos durante el tejido.

La franela es un tejido de algodón peinado mecánicamente para obtener un aspecto y un tacto esponjosos. Por debajo de cierto nivel, se denomina simplemente tejido peinado. La franela tiene un tacto extremadamente suave y cálido. Es ideal en invierno, en habitaciones ligeramente frías.

El jersey es otra sábana asociada con frecuencia a la ropa de cama. Sin embargo, se trata de un tejido de punto y no de una tela tejida, lo que le confiere la elasticidad que lo hace tan popular para las sábanas bajeras y la protección de la ropa de cama. Elástico en ambas direcciones, no se deforma con los lavados ni con el paso del tiempo.

¿Cómo elegir la ropa de cama?

Ahora que ya lo sabe todo sobre materiales y tejidos, quizá se pregunte cómo elegir su ropa de cama. Y luego está el último elemento, decisivo en la elección final de su futuro conjunto de cama: el estampado. Y esto es cuestión de gustos.

Sin embargo, aquí también puede optar por la calidad, eligiendo colecciones con un número limitado de ejemplares, para favorecer un estampado raro. Puede recurrir a diseños de diseñadores textiles, por la calidad de los dibujos y la fuerza de los estampados. Por último, puede fijarse en la calidad de los acabados: los ribetes en las costuras de la almohada, el reverso de una funda nórdica estampada, una sábana bajera a juego... son las señas de identidad de una marca de gama alta con diseños excepcionales.